No será tan fácil volver

Bajar al barro. Ese jodido lodo de la Segunda División que te atrapa. Es la categoría que más ha frecuentado el Levante UD a lo largo de su historia. Sin embargo, es duro asumir que se regresa a la "B" después de tantos años entre los mejores. No será tan fácil volver, es una primera obligación admitirlo.

- La plantilla levantinista 2022/23 durante un entrenamiento (@Levante UD) -

Por fortuna o por desgracia, el levantinismo se ha malacostumbrado a estar en lo más alto y a que las últimas visitas a la Liga Smartbank han sido pasajeras, muy breves. No más de dos años de duración, coincidiendo ese anterior precedentes de un par de cursos con el centenario del club. La última vez, con Juan Ramón López Muñiz como entrenador, se rompieron casi todos los récords habidos y por haber. 

Inconmensurables desde el primer momento, campeones y ascenso por la puerta grande con todo un equipazo, gracias a que Tito como director deportivo también supo realizar una gran reestructuración, acorde a las exigencias deportivas y económicas de donde se militaba.

A diferencia de aquella temporada 2016/17, el nivel de exigencia ha subido, por si fuera aún bajo hace un lustro. Ahora componen la Segunda División más equipos históricos, aunque la historia de poco sirve en estos casos. Importa el presente y la buena (o mala) labor de algunas entidades que han hecho méritos de estar en el segundo escalón del fútbol profesional. Real Zaragoza, SD Eibar, UD Las Palmas, Deportivo Alavés, Málaga CF... son solo algunos de los duros rivales a los que habrá que enfrentarse y superar.

Esto es una auténtica maratón, en la que importa la regularidad y los buenos mimbres tanto de un entrenador como de los futbolistas. Con sus métodos y sus fórmulas, Mehdi Nafti sabe que es prioridad reducir el número de errores. Aunque se mantiene buena base de la plantilla del año pasado, también coincide con una defensa casi idéntica, que fue la que más goles encajó en Primera.

Tras la marcha de emblemas como Morales y Roger Martí, toca confiar en otros protagonistas con nombres muy similares: Wesley Moraes y Roger Brugué. Los que se quedarán finalmente, tratarán de reponerse de su mala praxis de la anterior campaña liguera. Pero a falta de tres semanas para el cierre del mercado de fichajes, todavía queda mucho baile y se producirán cambios con bajas y nuevas llegadas.

La afición, por su parte, acumula otra cicatriz en su corazón. A pesar de ello, ha sabido pasar página e ilusionarse poco a poco. 14.000 abonados hay actualmente en el Levante. Solo hay que ver la respuesta de los más de 3.000 granotas que se dieron cita en la presentación de Iborra

Este viernes empieza lo bueno con la primera jornada contra la SD Huesca en el Ciutat de Valencia. Y reitero: no será tan fácil volver. Pero el Levante peleará en todo momento y el fútbol irá devolviendo lo que le fue quitando.


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