El Alcoraz sirvió el primer batacazo

No todo van a ser sonrisas. Por la trigésima jornada, el Levante UD vivió la cara amarga del fútbol. Tras una increíble racha de imbatibilidad, la SD Huesca sirvió el primer batacazo a modo de derrota por un claro tres a cero en el El Alcoraz.

- La SD Huesca derrota por tres goles al Levante UD (@Adolfo Benetó | LUD) -

La jornada se presentaba afín con motivo de los complicados duelos de la categoría. De hecho, los tres puntos auparían a los de Orriols al coliderato. Pero en tierras oscenses esas esperanzas se fueron bien pronto con un chasquido de dedos, también en la grada con los más de 300 aficionados desplazados. 

Porque lo cierto es que el Levante arrancó como un auténtico ciclón. Álex Muñoz, Joni Montiel y sobre todo un omnipresente Pablo Martínez asediaron la meta rival. Andrés Fernández fue saldando con éxito todos y cada uno de los lanzamientos. 

Esa chispa con la que saltó el Levante se fue apagando. No tardaría en salir a flote el ritmo cansino en la circulación y las inseguridades. La primera, con un pase atrás de Son, de los denominados prohibidos, que Obeng desperdició. Sin embargo, antes del descanso, el Huesca sacó tajada de una falta que Florian Miguel cabeceó libre de marca. Así se estrenaba el marcador.

Lejos de mejorar, la segunda parte se fue convirtiendo en un suplicio. Hasta la fecha el Levante de Javi Calleja no había encajado gol en acciones a balón parado y hoy tuvo doble plató en el menú. El capitán Jorge Pulido aprovechaba la confusión de un córner para anotar el segundo del Huesca.

Ni Musonda, ni Cantero, ni Wesley. Apenas una asociación entre De Frutos y Bouldini, con disparo al larguero del marroquí, hacía presagiar el milagro. El castigo fue aún mayor cuando de nuevo Dani Cárdenas se quedó anclado bajo palos y Juan Carlos anotó el definitivo tres a cero para el Huesca, con un testarazo en el palo largo. 

Con susto final en las gradas, requiriendo de asistencia sanitaria que obligó a detener el encuentro durante unos pocos minutos, la noche se cerró sobre el campo de El Alcoraz. Nuevamente el Levante desaprovecha otra oportunidad de oro para demostrar su mejor versión.