El mercado de fichajes es tan imprevisible como a su vez paradójico. En este mes inicial de movimientos, que todavía no ha pisado con fuerza el acelerador, se están cociendo a fuego lento un par de operaciones que tienen como protagonistas a Carlos Giménez, Aitor Gismera y a sus respectivos clubes, en la que hay una historia todavía con un desenlace abierto.
- Carlos Giménez y Aitor Gismera con Levante UD y Atlético de Madrid - |
Durante días recientes, tal y como ha podido confirmar este medio, el Levante UD y Atlético de Madrid han llevado a cabo una serie de conversaciones por dos de sus respectivos talentos. En el bando de Orriols, Carlos Giménez renovó hasta 2026 con el Levante, pero puede implicar un cambio de guion en próximas fechas que diera a su salida, si finalmente el jugador traslada su 'ok' definitivo a partir.
Según nos informan fuentes relacionadas directamente con el Atlético de Madrid, el cuerpo técnico del filial rojiblanco insiste en hacerse con los servicios del polivalente defensor. El interés por Carlos Giménez viene marcado desde antes de la prolongación de su contrato y especialmente Fernando Torres quiere ser clave para convencer y reclutar al valenciano, que viene de cuajar una notable temporada en el Unionistas de Salamanca.
Para ello, inicialmente se estaría planteando un traspaso en donde el Levante saliese beneficiado por futuros objetivos deportivos, en una operación similar a la ejecutada en su día con Aitor Fernández. Sin embargo, como se incide, primero debería contarse con el visto bueno del jugador y posteriormente adecuar las condiciones de negociación.
Que el Atlético de Madrid baraje esa fórmula, no es casual. De la misma forma, tal y como avanzó el Diario Marca semanas atrás, Aitor Gismera está en el foco para reforzar al Levante UD. El joven centrocampista entraría en el perfil que considera la dirección deportiva granota, después de su irrupción en el Atlético de Madrid B y previamente destacar en el juvenil, y con tal de remplazar a Pablo Martínez ante su próxima salida.
En ese sentido, si bien se pretenden operaciones independientes, serviría para estrechar más los vínculos para este intercambio de cromos. En caso contrario de que Giménez no vistiera de rojiblanco, se trabajaría al margen para avanzar con Gismera. Un hecho que, a falta de las conversaciones de la próxima semana, aún puede antojar más complicado el regreso de Vicente Iborra.
Iván Calero, una opción más
Si bien desde el Levante hay prioridades para el puesto de lateral derecho o se ha seguido a distintos jugadores a lo largo del curso, como son los casos de Toni Abad o Anderson Arroyo sobre los que ya informó Mundo Levante UD, la dificultad por la competencia es amplia y el tiempo juega en este caso en contra del propio equipo levantinista. Por ello, aunque todavía no ha habido conversaciones formales, la posible salida de Carlos Giménez implicará que se dieran las condiciones para pasar a la acción por Iván Calero.
El jugador, hijo del entrenador Julián Calero, milita actualmente en el FC Cartagena y todavía le resta un año más de contrato. Dadas las ventas inmediatas de Buba Sangare y Pablo Martínez, así como la necesidad de reforzarse ante tal situación, daría un margen de maniobra económica para estudiar su incorporación, si finalmente Felipe Miñambres diera el visto bueno. Para ello, todo debe seguir el citado orden establecido y, a fecha de hoy, está como una opción bien considerada internamente que solo se contemplará a partir de entonces. De lo contrario, Iván Calero seguirá en Cartagena.
* Nota de edición: A las 12:00 horas del mismo 23 de junio, fuentes del Atlético de Madrid confirman a este medio un principio de acuerdo con Giménez por una cantidad de 100.000 euros más bonus deportivos.
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