La figura inigualable de Antonio Calpe

Antonio Calpe ha fallecido a los 81 años de edad. Toda una leyenda del Levante y Real Madrid, con más de quince años dedicados en cuerpo y alma al fútbol y un tipo emblemático que nunca será olvidado.

- Antonio Calpe, toda una vida dedicada al Levante UD y Real Madrid (@LUDHistoria) -

¿Quién es Antonio Calpe? Hablar de él es hacerlo de la figura de un auténtico caballero, sin duda. Un levantinista de los pies a la cabeza, hijo de Ernesto Calpe, único, excepcional y de los mejores que se han labrado y visto con ADN granota. Con sentido de pertenencia y que, tras dos años iniciales en el CD Alcoyano, cimentó toda su carrera cosechando éxitos entre los clubes del Levante UD y Real Madrid. 

Un defensa lateral, veloz, autoritario y de jerarquía, dicen aquellos que le vieron jugar. Y nada más lejos de la realidad, porque tras formar parte del primer ascenso del equipo levantinista a la élite española y defender la zamarra azulgrana en aquellas dos gloriosas temporadas que precedieron a todo un futuro de postín, terminó fichando por el Real Madrid a cambio de 1.650.000 pesetas en el año 1965, tal y como se relata en los documentos de la época. Un precio que valía oro y que justificó durante seis años vestido de blanco para alzar una Copa, tres Ligas y hasta proclamarse campeón de Europa con el Real Madrid.

- Antonio Calpe como jugador del Levante UD (@LUDHistoria) - 

El del Grau regresó entonces a su Levante. Antonio Calpe continuaría ligado otros cinco años como jugador, incluso militando en Tercera División, y al inicio de los años 80 estuvo con el cargo de entrenador, acumulando más de 225 partidos hasta su retirada oficial en la entidad ya afincada en Orriols.

Homenajes no le faltaron en los tres clubes por los que pasó. Cualquier detalle era poco para honrar todo lo que había regalado y hecho disfrutar. Especialmente emotiva fue la noche del 6 de enero de 2011, en la que realizó el saque de honor del partido de Copa entre Levante y Real Madrid y recibió el cariño de toda esa afición del Ciutat de Valencia que le había admirado y de la que formó parte, hasta que una larga enfermedad le privó de ello. Antonio Calpe nos deja, pero su recuerdo siempre estará presente. Descanse en paz.