El enojo y las lágrimas de centenares de aficionados el pasado jueves en Granada serán prácticamente imposibles de olvidar. El fútbol otorgaba una nueva oportunidad y el Levante volvía a quedar de nuevo retratado, cosechando otra abultada derrota en que se encajó cinco goles. Ahora, con pie y tres cuartos en Segunda División, tan solo muchos de ellos esperan recibir una última alegría como local antes de consumarse matemáticamente el descenso.
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| -Foto: Jorge Ramírez / Levante UD- |
Y es que, para más inri, los partido a priori más asequibles ya quedaron atrás en el camino. Se recibirá al Athletic Club el domingo en Orriols. La eliminación de la Europa League ha dejado algo trastocado a dicho equipo, pero de lo que no cabe duda es que son un hueso duro de roer y buscarán la victoria para certificar oficialmente su estancia en competición continental para el próximo año.
Muchas son las bajas que acumula Ernesto Valverde en su plantilla. La última fue la del fiable y polivalente De Marcos, que se une a la de sus compañeros Sabin Merino, su mejor defensor Laporte y a la del máximo artillero nacional Aduriz. A la espera de las decisiones finales de su entrenador, sus puntuales ofensivos serán con casi total seguridad Williams y Muniaín, dos hombres muy veloces. También, un Raúl García que ya sabe lo que es ser protagonista en este estadio durante otras temporadas, deberá dirigir a los rojiblancos y ejercer como líder.
En el Levante, poco hay que decir. La historia está clara. Cierto es que de ganar, dado los difíciles encuentros esta jornada de sus rivales por el descenso, podría volver a hacer sombra a estos y volver a salir en Málaga a jugarse otra vez el todo o nada, pero después de tantos desengaños es difícil encontrar y creer dicha motivación.
Y Rubi, después de no saber ya que pensar y como agotar sus últimas cartas, aunque sigue manteniendo su discurso esperanzador, seguirá confiando en los mismos de siempre. Simao por su expulsión se perderá el partido, al igual que los lesionados Toño e Iván López junto a los ya clásicos descartes técnicos de Orbán, Trujillo, Xumetra y Ghilas. El capitán Juanfran volverá al lateral zurdo, mientras que Jefferson Lerma se presume que recupere la vacante en la línea de centrocampistas. El tanto de Rubén García en Los Cármenes podría jugar a su favor para partir en alguna de las bandas como factor sorpresa.
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