El Levante ha
oficializado la llegada de Simao Mate como agente libre, después de
que el centrocampista mozambiqueño se desvinculase de su club de
origen, el Shandong Luneng chino. Firmará un contrato hasta junio de
2015, con unos emolumentos de unos setecientos mil euros anuales que
el auparán al escalón salarial más elevado de la plantilla.
Nacido en Inhaca
(Mozambique) el 23 de julio de 1988, Simao cuenta con una concurrida
trayectoria y una dilatada experiencia pese a su juventud. Inició su
carrera deportiva en el Clube Ferroviario de Maputo, equipo con el
que se proclamó campeón del campeonato nacional. Sus geniales
condiciones físicas y el potencial que auguraba su fútbol no
pasaron desapercibidos para los ojeadores de muchos clubes europeos.
Sin embargo, fue el Panathinaikos el conjuto que, en 2007 y previo
pago de apenas cincuenta mil euros, se hizo con sus servicios.
Su anonimato y la
irrisoria cantidad que supuso su llegada a la entidad contrastaron
con el enorme rendimiento que ofreció en su primera temporada,
convirtiéndose en una pieza indiscutible y en uno de los nuevos
héroes de la hinchada helena. Desde la dirección técnica eran más
que conscientes de su proyección y su crecimiento, y que una mejora
de determinados conceptos tácticos combinada con sus aptitudes
físicas podrían convertirle en todo un referente dentro del perfil
de centrocampista defensivo y de contención.
Así, completó un primer
curso en Grecia con 27 encuentros disputados y consagrándose como
pieza clave en el esquema del equipo. La siguiente temporada fue la
de su consagración, logrando además estrenarse como goleador
(inclusive en UEFA Champions League) y dándose a conocer por sus
irritantes marcajes sobre rivales de elevado nivel técnico, a
quienes dilapidaba deportivamente (caso de Diego, por entonces en el
Werder Bremen).
Su valor crecía a pasos
agigantados, y esta circunstancia no pasó desapercibida para muchos
equipos europeos de élite, que trataron de hacerse con sus
servicios. Además, fue incluido en una prestigiosa lista que
condecora a los cuarenta mejores jugadores jóvenes del planeta,
elaborada por Tuttosport, siendo así el primer mozambiqueño que
alcanzaba tal galardón.
Tras renovar en 2009 su
contrato con el equipo ateniense, la carrera de Simao pareció
estancarse con el paso de los días, y su carisma comenzó a diluirse
a la par que lo hacían las aspiraciones deportivas de un combinado
que parece cada día más abocado a la deriva. Allí compartió
vestuario con Vyntra, una de las más gratas noticias que ha traído
este 2013 al equipo dirigido por Juan Ignacio Martínez.
En 2012, y con un club
sumido en plena disolución deportiva, Simao emprendió una aventura
que ha sido tan breve como poco fructífera en tierras chinas, de la
mano de Henk Ten Cate, anterior preparador del PAO. Tras
desvincularse de la entidad asiática, llega a Valencia con la idea
de conocer paso a paso la estructura del club, a sus nuevos
compañeros y ayudar, cómo no, a dosificar ese centro del campo que
tanto necesita la suma de nuevos efectivos.
Tras este breve repaso de
su trayectoria profesional, nos centraremos en definir a Simao Mate
como futbolista, pese a que las líneas maestras de sus cualidades ya
han sido expuestas con anterioridad. Es un futbolista muy ágil y con
unas condiciones físicas excepcionales, lo que le convierten en un
baluarte más que preciado en la medular. Con gran capacidad para el
marcaje en corto, es inteligente en el posicionamiento y cubre con
regularidad y certeza las subidas de los laterales. Para que os
hagáis una idea, su estilo de juego es muy similar al de Claude
Makélélé. En su debe, lógicamente, su escaso bagaje ofensivo, las
dificultades que atesora con el balón en los pies y la incógnita
que supone verle actuar en una competición de máxima exigencia de
manera regular.
Por todo esto y mucho
más, te deseamos lo mejor durante tu estancia en el Levante UD.
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