Las propuestas tácticas del entrenador Julián Calero

Un nuevo entrenador implica cambios. Es sinónimo de asimilar nuevos modelos, automatismos y variantes tácticas. La llegada de Julián Calero al Levante UD no solo ha otorgado versatilidad según las necesidades ofensivas o defensivas del momento, sino también adaptarse a un dibujo que durante la pretemporada está sacando el potencial de una plantilla granota que estos dos años atrás se sentía en parte desaprovechada.

- Julián Calero ha empleado dos sistemas tácticos en el Levante UD con variantes (@A. Benetó | LUD) -

Principalmente, a lo largo del primer mes de trabajo y tras cinco partidos disputados en verano, Julián Calero ha optado por dos propuestas tácticas, en ocasiones con ligeras variantes. La primera de ellas y más usada ha sido la de un 4-3-3. Dando potencial a la fase constructiva, el míster levantinista ha armado su juego con tres centrocampistas con galones, de los cuales uno suele ser de corte más defensivo. 

Con una referencia ofensiva, en donde Morales, Bouldini y Carlos Espí respectivamente se han rifado el '9', se ha dado gran importancia al puesto de los extremos, que había perdido fuerza en el Levante UD y donde precisamente hay perfiles que encajan a la perfección, como son Fabrício Santos, Brugui, Carlos Álvarez, Víctor Fernández Junior, Iván Romero cuando vuelva o incluso el propio Morales, en donde logró transformar su primer gol tras su regreso al club. En el caso de Carlos, ahora con el 24 a la espalda, también preparado para una labor más de organizador cuando se le requiera. Además, los laterales también han contado con gran libertad para doblar por banda y dar apoyo ofensivo.

Todavía dentro de ese primer modelo, se ha visto una readaptación al 4-1-4-1. Este esquema derivado ha sido empleado sobre todo para las transiciones defensivas o proceso de recuperación del esférico, así como en aquellos momentos de hacer una apuesta futbolística más conservadora cuando el rival aprieta o bien si el resultado es favorable. 

- Julián Calero entrenador Levante UD -

Como Julián Calero ha demostrado, quiere un equipo generoso y que no escatime en esfuerzos, ya que esas bandas no solo están para brillar en busca del gol. Además, ese solitario centrocampista por delante de la defensa encaja a la perfección con el rol que puedan desempeñar Iborra tras su recuperación física u Oriol Rey.

Finalmente, la segunda propuesta táctica es la del tradicional 4-4-2. Un dibujo que también está garantizado que se verá en numerosas jornadas, según las exigencias del rival o necesidades propias. En este caso, si bien se ha empleado algo menos durante los test de pretemporada, no quiere decir que vaya a ser menos relevante.

En estos casos, siempre se ha empleado con dos referencias ofensivas, de las cuales una es más posicional y otra más móvil. Bien con Bouldini o con Carlos Espí, han gozado de un acompañante que es capaz de atacar los espacios o de los que también destacan por su velocidad si se desenvuelve más en banda.

Por otra parte, para aquellos exteriores que actúan desde segunda línea, ha sido la opción en la que futbolistas con menor rodaje como Óscar Clemente o Rober Ibáñez puedan enlazar o bien que Carlos Álvarez, Víctor Fernández Junior y Sergio Lozano cuando vuelva den de cierta profundidad gracias al conjunto de los 11 futbolistas.

Lo que sí parece claro es que, salvo futuras incorporaciones, Julián Calero permanece abonado a la defensa par. Hasta la fecha solo se cuenta con Elgezabal, Dela y Cabello, que han ido rotando y demostrando que la competencia estará garantizada en ese centro de la zaga, algo que agradecerá el técnico madrileño.