Otro bocadillo de mortadela contra el CD Leganés

Ser previsible en el fútbol, sobre todo cuando un equipo no termina de funcionar, no suele deparar nada positivo. El partido del Levante UD contra el líder de la categoría fue un calco de lo vivido gran parte de esta temporada. Tan solo las decisiones del VAR, que esta vez no jugaron una mala pasada, impidieron que el CD Leganés regresara con los tres puntos.

- El Levante UD no pasa del empate sin goles contra el líder CD Leganés (@A. Benetó | LUD) -

La primera parte. Esos únicos 45 minutos de disfrute. Con eso hay que contentarse hoy en día, aunque a veces ni eso. Los azulgranas llevaron la batuta y también el peligro, especialmente con dos balones estrellados contra la madera. Uno fue de Dani Gómez, pese a que posiblemente se hubiese anulado por posición adelantada; el otro, tras un rechace en Iván Romero.

Precisamente, Dani Gómez fue una de las pocas notas destacadas, en donde volvió a brillar otra noche Carlos Álvarez. Mención especial también para Álex Valle, que desbarató una llegada clara del conjunto pepinero y por sus botas pasó otro de los disparos con más veneno, aunque en el segundo tiempo fue sustituido por molestias.

La segunda parte. La modificación de Sergio Lozano, con problemas intestinales, por Óscar Clemente no fue positiva. Tampoco lo fue la estrategia de Javi Calleja frente a un Borja Jiménez que lo adelantó por la derecha tras el descanso. 

Sin noticias en ataque, dos acciones marcaron el rumbo del partido. Ambas concluidas con gol del Leganés y anuladas por fuera de juego desde el VAR. Sergio González anotó el primer tanto, pero existía un fuera de juego posicional en la primera pugna del balón. Casi sobre la bocina, el exvalencianista Jorge Sáenz firmaba el segundo gol visitante, pero de nuevo y tras una larga deliberación se confirmaba que su posicionamiento lo dejaba ligeramente adelantado.

Al final, un punto de consolación que sabe a muy poco. El tramo actual del calendario, con algo más de dificultad, no se traduce en buenos resultados. Y en esta noche de viernes, al Levante UD y al levantinismo se le sirvió otro bocadillo de mortadela.