¿Vamos a subir? Hoy esa pregunta tiene una respuesta más firme, casi afirmativa. La penúltima oportunidad por fin fue aprovechada. El Levante UD dio un paso de gigante para su objetivo, imponiéndose contundentemente al Deportivo Alavés. Una victoria para casi tocar el cielo y situarse en puestos de ascenso directo.
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| - Pepelu celebra el primer gol con la camiseta del Levante UD (@Adolfo Benetó | LUD) - |
Fiesta, fútbol y más fiesta. Un resumen de esta jornada de sábado, en el que el levantinismo no podía pedir más. Un recibimiento de época, para marcar el primer gol psicológico. 25.000 almas a las que se sumó otro levantinista de pura cepa para marcar el primer tanto: Pepelu. El centrocampista desvirgó el marcador. Una volea de ensueño, al palo largo, inalcanzable y que adelantó al Levante. El primer gol de Pepelu como levantinista; no encontró mejor cita y forma para hacerlo.
A veces el rigor táctico es más que suficiente. Y en eso el plantel de Javi Calleja estuvo de matrícula de honor. Un inmaculado Pepelu, al que se sumó otro granota de corazón como Iborra para liderar y coger galones a la hora de la verdad, dieron ese "punch" necesario. El de Denia se estrenaba hoy, pero una parada magnífica del portero Sivera cuando estaban frente a frente impidió su doblete. Tras ese mismo córner, testarazo letal. Wesley cabeceaba sin piedad para anotar el 2-0 favorable al Levante.
Álex Muñoz cayó en combate por lesión. Pero los azulgranas no cayeron en esta batalla, al contrario. Bien firmes contra los de Luis García Plaza, el tercer gol merodeó más cerca que el primero de los babazorros. Joni Montiel, Marc Pubill y Rober Ibáñez lo acariciaron. Apenas Asier Villalibre fue el único que llevó el peligro para el Alavés, con el punto de mira desacertado.
El mejor partido a domicilio fue en Vitoria. Y nuevamente esta tarde, contra el mismo rival, se firmó posiblemente la mejor actuación colectiva del Levante en su casa. De esta forma, un equipo demuestra querer ser y hacer méritos para volver a Primera División.
Me gustaría destacar a Cantero que va forjándose poco a poco, pero que ha estado rapidísimo y cada día un poco más peligroso y Musonda, que ha tenido dos o tres detalles realmente buenos. Pero me quedo con un equipo que ha estado muy seguro, se ha hecho grande y ha ido a ganar desde el primer minuto. No se les pide más que eso
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