Tras el descenso a Segunda División son muy pocos los futbolistas del Levante UD que, a día de hoy, tienen su continuidad asegurada para la próxima temporada. Unos terminan contrato, otros deberán salir obligatoriamente para hacer caja y también están los que no quieren seguir (o el club no quiere que sigan). De la criba buscarán salvarse Roger Brugué, Pablo Martínez y Álex Blesa, nombres de futuro que salieron cedidos en busca de protagonismo y que ahora están llamados a completar la plantilla.
- Brugui, Pablo y Blesa, sensaciones contrapuestas en sus respectivas cesiones - |
El primero de ellos, Brugui, es sin duda el que mejores sensaciones deja. A préstamo en el CD Mirandés, fue suplente habitualmente desde agosto hasta mediados de noviembre. Sin embargo, terminó haciéndose con la titularidad y acabó firmando ocho goles y dos asistencias en 42 partidos, contribuyendo de forma importante a la permanencia del cuadro burgalés. De hecho, ha sido su segundo máximo goleador así como su jugador con más encuentros disputados.
Brugui llegó a coste cero el pasado verano procedente del Nástic de Tarragona, equipo de 2ªB. Disputó algunos minutos sueltos en pretemporada y no llegó a debutar en partido oficial antes de irse al Mirandés, por lo que hasta el momento su nivel era una incógnita total para el aficionado levantinista. El extremo de 25 años, por contra, ha rendido con creces este curso en la categoría de plata y ya hay una gran expectación en torno a lo que será capaz de aportar ahora en clave granota, también sabiendo que puede jugar por ambas bandas y el equipo ahí anda corto de efectivos desde hace años.
Por otra parte, Pablo Martínez ha ido de más a menos. Jugó con el Levante hasta invierno, teniendo bastantes oportunidades aunque no regularidad, así que en enero puso rumbo a la SD Huesca de Xisco Muñoz donde se esperaba que diese un paso al frente definitivo. Empezó bien, marcando en su debut y convirtiéndose en un fijo en el once inicial, si bien se fue diluyendo con el paso de los meses hasta el punto que, de las nueve últimas jornadas, solo fue titular en dos. Un dato significativo es que el Huesca únicamente ha ganado un partido con Pablo como suplente, pero en cualquier caso su rendimiento deja algunas dudas.
Finalmente, Blesa es quien menos ha podido demostrar su nivel: apenas dos titularidades en trece encuentros en Primera RFEF con el CD Castellón, un claro aspirante a playoffs de ascenso a Segunda que ha terminado la temporada casi en descenso. Su entrenador, Sergi Escobar, ni siquiera ha contado con él en la recta final de liga e incluso le dio permiso para volver antes de tiempo al Levante, donde ha formado parte del stage organizado por Felipe Miñambres la semana pasada.
Es una situación que ni siquiera ha entendido la afición orelluda, pues vio en Blesa un futbolista de mucha proyección en los pocos minutos que tuvo. Él ha manifestado públicamente su deseo de quedarse en Orriols, y pese a que tendrá complicado hacerse un hueco, su edad (20 años) y su recorrido en la cantera le avalan como uno uno de los activos más prometedores del club.
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