Si el Levante UD pierde mañana a las 21:30 horas en el Santiago Bernabéu, será equipo de Segunda División. Es el panorama que queda tras la victoria del Granada y, más importante, la versión anticompetitiva del equipo durante la mayor parte de la temporada. Hasta ahora la salvación quedaba sujeta a una cuestión de oficio y mantener la fe, pero ahora sí, las matemáticas pueden dictar sentencia. Un partido contra todos y contra el descenso.
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| - Con el descenso en juego, el Levante visita al campeón de liga (@José Miguel Fernández | Getty Images) - |
La distancia con el Cádiz aún a pesar de que éstos perdiesen frente a la Real Sociedad en el duelo que disputan dos horas antes, sería insalvable siempre y cuando los granotas no saquen al menos un punto de la capital. Aumenta la presión, y aunque la imagen de las últimas semanas ha sido muy positiva, lo que falta es tiempo es para remontar. Todo pasa por hacer pleno. Antes del último partido en el Ciutat era necesario firmar un cuatro de cuatro hasta la jornada 38, ahora la idea es la misma: hay que ganar sí o sí los tres que quedan.
El milagro ya era más que improbable, pero todo se dificulta cuando toca visitar al Real Madrid. Ya coronados campeones de liga y con la cabeza puesta en la próxima final de Champions League del 28 de mayo, Carlo Ancelotti ha destacado en repetidas ocasiones que los siguientes encuentros serán para ellos un previo en el que no perder ritmo, con rotaciones habituales. Es algo que el Levante deberá aprovechar a la hora decentar la balance a su favor por intensidad y sentimiento. Si en los últimos años ya se ha logrado vencerles en momento donde había mucho más en juego para ellos, esta vez el miedo no es una opción.
Preguntado en rueda de prensa por si éste iba a ser el partido de mayor presión en toda su carrera en los banquillos, Alessio Lisci ha destacado que no lo nota así y que, en ningún momento, ha pensado en qué pasa si no se logran los tres puntos. "Igual un empate nos deja vivos, pero no podemos jugar al empate", asegura el italiano, quien también ha destacado la importancia de saber gestionar las rotaciones debido a las pocas horas que habrá de diferencia respecto al partido del próximo domingo ante el Deportivo Alavés (otra posible final por la permanencia).
En el ámbito deportivo, pocas sorpresas en el bando levantinista. Franquesa es el único descarte por decisión técnica, mientras que Mustafi, De Frutos y Clerc son baja por lesión y Soldado no se ha recuperado a tiempo de sus molestias. Por suerte, Roger Martí incluso apunta a la titularidad. Más imprevisible se presentará el Real Madrid, que sí recupera a Courtois tras superar una gastroenteritis y alineará a otros jugadores importantes como Benzema y Vinicius. Más bajas cuentan los blancos, entre ellos Marcelo, Asensio, Alaba, Isco y Carvajal.
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