El Levante UD es virtualmente equipo de Segunda División. Los batacazos post-Mallorca, la inacción en el mercado de enero y, finalmente, la incomparecencia del pasado viernes en el Coliseum parecen haber dictado sentencia para una temporada donde cada leve atisbo de mejora se ha quedado en espejismo. Solo un milagro en el que pocos creen podría cambiar dicho destino. De darse, deberá comenzar sí o sí mañana domingo.
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| - Clerc, Mustafi y Juanmi en una disputado durante el último Real Betis-Levante UD (EFE) - |
El orgullo, ausente en el último partido, deberá verse más que nunca ante los hombres de Manuel Pellegrini, que está firmando los mejores números de la historia de la entidad bética. Terceros en liga, con pie y medio en la final de la Copa del Rey y con una plantilla de altísimo nivel, parten como claros favoritos pese a que los recientes precedentes en el Ciutat son positivos en clave granota: tres victorias en los tres últimos años, marcando cuatro goles en todos ellos.
Alessio Lisci ha reconocido en rueda de prensa que es complicado enganchar a la afición y que está en todo su derecho de silbar, pero les pide apoyo durante los noventa minutos. También destaca que esta ha sido "la semana de entrenamientos más intensa" desde que cogió el timón, pues el equipo quiere responder ante la mala imagen general. "No estamos como para hablar, estamos para trabajar".
Campaña, Postigo y Mustafi se quedan fuera por lesión, mientras que no hay problema aparente con el estado físico de Duarte. Además, Roger Martí es baja por acumulación de tarjetas. El Betis, que llega con cinco días menos de margen para preparar el partido tras disputar la ida de semis coperas este miércoles, viaja sin Camarasa, Bravo y Montoya. También se caen Canales y Guido Rodríguez, dos bajas muy a tener en cuenta, mientras que Juanmi y Joaquín son duda.
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