El balance que deja el mercado del Levante UD 21/22

Shkodran Mustafi ha puesto el broche a un mercado de fichajes que parecía haber concluido, a golpe de rescisiones, el 31 de agosto. El trabajo en las oficinas del Levante ha dado pie a cuatro nuevas incorporaciones para afrontar la nueva temporada, pero la falta de movimiento durante la mayor parte de julio y agosto deja, un año más, varias asignaturas pendientes.

- David Navarro y Manolo Salvador, encargados de la dirección deportiva (Diario AS) -
El capítulo de entradas supuso un gasto de menos de un millón de euros (ojo, salarios aparte). Roberto Soldado cambió Granada por Orriols por los 0'5 millones de euros que figuraban en su cláusula liberatoria, Enric Franquesa llegó finalmente por 0'4 millones en una operación en la que el Villarreal mantiene el 50% de los derechos del jugador y una opción de futura recompra, y Roger Brugué firmó como agente libre una vez concluida su vinculación con el Nàstic de Tarragona. Finalmente, Mustafi también llegó a coste cero tras abandonar el Schalke 04.

Oportunidades de mercado por las que el club movió ficha rápido (al menos con las tres primeras), cubriendo posiciones importantes. El gran fracaso llega, sin embargo, con la operación salida. Tras los últimos reajustes de La Liga sobre el límite salarial, los granotas empezaron el verano, al igual que en el ejercicio pasado, con necesidad de obtener ingresos por valor de 16'5 millones de euros. La realidad es que Rochina y Doukouré terminaron contrato, Brugué tal como vino hizo las maletas rumbo al Mirandés (cedido), mientras que Toño, Arturo Molina, Koke Vegas y Ferni fueron rescindidos, con los costes añadidos que ello conlleva. Entre los siete, cero euros para las arcas.

A falta de saber si Hernani (quien saldrá seguro después de quedarse sin dorsal) toma un camino similar, solo Sergio León podría haber generado algo de beneficio con su traspaso al Valladolid, aunque las cantidades no se han hecho públicas. Dado el descenso del cuadro pucelano, todo hace indicar que la suma económica será mínima y el Levante seguirá pagando gran parte de su salario, superior a los dos millones de euros.

- El mercado del Levante trae consigo cuatro fichajes y ocho salidas (Levante UD) -

Todo ello en el que, a priori, iba ser el verano de "las grandes ventas" a fin de saldar la deuda. Había tiempo de sobra para centrarse en ellas, pues desde el fichaje de Franquesa hasta el 31 de agosto no se produjeron más movimientos. Pero ni Bardhi, ni Campaña, ni De Frutos, ni Vezo, ni en definitiva nadie por el que se pudiera sacar tajada ha estado cerca de salir.

De ahí surge una cadena de consecuencias negativas. La ausencia de ingresos impidió traer refuerzos para otros puestos de máxima necesidad como el lateral derecho o los extremos. Un ejemplo claro en ese sentido es Óscar Plano, quien por mucho interés que hubiese puesto sobre él, no pudo venir. A su vez, la mayoría de los rivales directos del cuadro granota tuvieron un control sobre el mercado mucho mayor. Tal y como informó el periodista Carlos Ayats en el programa 'Sin Tregua Radio', el Levante es el segundo equipo que menos movimientos ha realizado este verano, únicamente por detrás del Athletic Club.

Ha sido una ayuda económica externa, la del acuerdo de La Liga con el fondo CVC, la gran salvadora de la dirección deportiva levantinista. Primero, porque era la única vía posible para mantener a la plantilla actual. Segundo, porque permitió inscribir a los recién llegados y a las últimas renovaciones (¿se imaginan un Levante sin poder inscribir a Morales?). De no haber aparecido CVC, nada de eso habría sido posible. Aunque eso no hace que desaparezcan los problemas financieros, simplemente los desplaza en el tiempo. El año que viene, seguirán estando ahí.


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