Después de una temporada complicada con la SD Huesca, Jorge
Miramón recala en las filas del Levante. Una vez debutado en Primera División -y
con una notable aparición- el aragonés refuerza la defensa granota y se alista
a su segunda aventura en la élite, tras previo paso por equipos como el Lleida, Leganés y Reus en la Liga 1|2|3. Un diestro de características
interesantes en campo propio y ajeno.
-Miramón durante un partido (@SD Huesca)- |
Doble herramienta
Con la banda derecha como su lugar preferido -más
concretamente como lateral-, no cabe duda de que el rendimiento mostrado por su
parte ha sido de lo más positivo dentro del conjunto oscense. Tanto en defensa
como en ataque, podría decirse que se trata de una doble herramienta partiendo
desde el lateral derecho. Así, una base importante de su juego se encuentra en
el marcaje al rival, amplio recorrido y un corte limpio que le sirvió para
llamar la atención de varias direcciones deportivas. Uno de esos futbolistas
que puede superar cualquier expectativa en conjuntos de media o baja tabla.
Respecto al término de doble herramienta, sería un grave
error olvidar su aportación ofensiva. A sus 30 años, el estilo del zaragozano
incluye el juego por arriba y los balones en largo debido a su facilidad a la
hora de ayudar en jugadas rápidas. Hábil en situaciones de ese calibre, su
llegada al área rival no pasa desapercibida ni en el interior ni como extremo,
aportando peligro a base de centros e internadas entre la defensa contraria
como ya hizo ante equipos de la talla del Real Betis.
Su único gol en LaLiga Santander, ante el Athletic Club en la
Jornada 2, así lo demuestra. Sin miedo a probar, Miramón consigue sorprender
con sus apariciones ofensivas y el buen manejo de la situación. Una pieza capaz
de desplazarse en pos de reforzar la retaguardia del compañero. Un filón
inagotable capaz de rendir al máximo nivel desde el primer minuto hasta el
último.
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. Su buen hacer en
defensa no sucede siempre, ya que en ciertas ocasiones muestra descolocaciones
respecto al marcaje e incluso con su propia zaga. Un factor inusual, pero no
menos importante por ello. Su aguante del balón tampoco es el más favorable en
momentos de presión, facilitando la fragilidad de equipos ya de por sí
limitados.
Las lesiones también han lastrado al jugador que, a pesar de
haber disputado 32 partidos la pasada campaña, se ha visto impedido para lograr
el 100% en su estado físico. Hasta tres lesiones musculares ha sufrido, todas
ellas en el bíceps femoral de la pierna izquierda y dos de ellas siendo
recaídas.
En el cómputo global, se trata de un refuerzo de garantías
tanto para ejercer de titular como de suplente. Con más puntos fuertes que
débiles en su haber, Miramón está preparado para continuar su aventura en la
máxima categoría del fútbol español. A priori, no tendrá ningún problema para
mantener el nivel mostrado hasta el momento.
Texto por: José Gil (@JoseGilHuesca), periodista de El Rincón del Alcoraz y Radio Huesca.
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