Erick Cabaco: El espíritu del gladiador

Uruguay se ha convertido en las dos últimas décadas en un manantial de zagueros de excelente nivel. Centrales de la talla de Diego Godín, Martín Cáceres o Diego Lugano heredaron el trono de Montero y compañía. Sin embargo, la nueva hornada de centrales charrúas promete ser tan poderosa o más que sus predecesores. Las figuras de Emiliano Velázquez, José María Giménez y Mauricio Lemos son conocidos para el gran público, especialmente en nuestro país, y que hacen soñar al bueno de Tabárez con un próspero y prometedor devenir en una demarcación tan sumamente crucial en este deporte. Sin embargo, pocos son los aficionados que habían escuchado hasta la pasada semana el nombre del nuevo central del Levante UD, Erick Cabaco.

-Cabaco con la camiseta de Rentistas-
El de Erick no es un nombre ajeno a la dirección deportiva del club desde hace más de dos temporadas, cuando Manolo Salvador valoró seriamente su incorporación. Cabaco, quien comparte quinta con dos figuras emergentes en nuestro balompié como Giménez y Lemos, ha completado desde su etapa formativa junto a ambos la terna de centrales del combinado celeste en categorías inferiores. Su salto a Europa del pasado verano, rumbo al Nancy, le sirvió para adquirir una valiosa experiencia y confirmarle que España, de acuerdo con numerosos expertos, sería el destino ideal para encontrar un crecimiento deportivo óptimo.

-Cabaco pelea ante Argentina sub-20-
Cabaco debutó como profesional en las filas del Rentistas, equipo de su Montevideo natal. Con apenas 18 años de edad, su primer curso sirvió como adaptación. En sus tres partidos durante la temporada 2013-2014, Erick dejó muestras ya de sus notables virtudes en cuanto a contundencia y poderío en las acciones a balón parado. Su segunda temporada en Rentistas le asentó como una de las grandes promesas del campeonato, hecho que certificó meses más tarde y que le valió para ser convocado con la Selección sub-20. Hasta un total de 25 encuentros disputó de la mano de Coito, erigiéndose como una absoluta referencia y situándose a la altura de los ya mencionados Giménez y Mauricio Lemos.

-Cabaco ante Belhanda (UEFA)-
Su sobresaliente y prometedora proyección no pasó desapercibida para los dos gigantes de Montevideo. Peñarol y Nacional pelearon por hacerse con los servicios de un Cabaco al que también tentaron desde Europa, y más concretamente desde València. Y, si afinamos un poco más, desde las entrañas de Orriols. La operación no cuajó y su salto a Europa se pospuso prácticamente un año. Durante ese período, Erick defendió los colores de Nacional de Montevideo, dirigido por el ex-guardameta del Levante UD Gustavo Munúa. Algún que otro problema físico le apartó de una línea de regularidad que siempre se antoja vital a su temprana edad y le abocó, definitivamente, a abandonar su Uruguay natal rumbo a Francia.

El AS Nancy fue su primer y único destino en el viejo continente hasta su llegada este verano a La Liga. El cuadro galo fue un auténtico desastre en cuanto a gestión y confección, por lo que su descenso a la categoría de plata no supuso sorpresa alguna. No obstante, Erick dejó notas más que positivas en sus veinte encuentros defendiendo la elástica franjirroja. Demostró un carácter infranqueable, una capacidad de liderazgo asombrosa para su edad y volvió a dejar latente su brillante dominio del juego aéreo. Porque Cabaco es sinónimo de anticipación, de fuerza y de contundencia. Es capaz de mezclar con centrales expeditivos o convertirse en referencia al corte. Se mueve especialmente bien en las acciones de estrategia y, tal vez como único punto negativo, se podría destacar su exceso de ímpetu en ciertas ocasiones y su duro carácter sobre el verde. Prepárense, porque el gladiador está listo para la batalla: 

"Ave César, los que van a morir te saludan".

Comentarios