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| -Foto: Jorge Ramírez / Levante UD- |
La siguiente historia se puede enfocar de diferentes maneras. Podemos
retroceder cuatro años atrás, momento en que el Levante escribía sus
letras doradas con el debut en Europa League y en que un Mallorca
dirigido entonces por Caparrós parecía tener ya estabilidad en el fútbol
español. Podemos también echar la vista atrás a hace poco más de un año
cuando el nombre de Robert Sarver entraba en escena fracasando en sus
intentos de tomar el control del decano de la Comunidad Valenciana y que
hubo de conformarse con acomodarse en las Islas Baleares para salvar el
conjunto y orgullo bermellón. Pero lo que realmente importa es el
presente. Y efectivamente, no es oro todo lo que reluce. Levante y
Mallorca, Quico Catalán y Sarver, fracasaron despertando de su sueño y
se reencuentran en Segunda División.
Uno de los grandes dilemas y debates del levantinismo reciente toma si cabe más fuerza ante situaciones así. Más aún cuando todavía se cuestiona y hay dudas sobre el próximo proceso de renovación del Patronato. Deportivamente hablando y después del duro batacazo del descenso donde se cuestionó si este era el rumbo correcto, se ha plantado sabia nueva y se han fortalecido algunos cimientos.
El actual líder de la categoría está 'on fire'. Sus números son envidiables, con 20 puntos de 27 posibles, hecho que le convierte en uno de los equipos recientemente descendidos más fiables del panorama europeo. Y eso que en Almería se mantuvo el tipo en escasos momentos, pero la rápida remontada obrada tras la reanudación dejó a tiro regresar con tres puntos hasta que Quique González salvó los muebles del equipo local y un empate.
Esta tarde se buscará la quinta victoria seguida en el Ciutat de Valencia. Sí, habéis leído bien, la quinta. Algo que no sucedía desde hace catroce años y que ha permitido que el coliseo granota vuelva a ser un fortín. Para hacer la brecha más amplia respecto a sus perseguidores, el Levante de Muñiz contará de nuevo con Pedro López, Rubén García y Rafael Martins. No en cambio con Casadesús, que ultima su recuperación. En la mano del técnico cántabro estará incluirlos en las convocatorias que tan difíciles se le presenta de hacer, así como el de encajar un puzzle en el que Espinosa podría ceder su puesto de partida como novedad más destacada.
Después de su eliminación en Copa del Rey, el Mallorca toma el vuelo a la capital del Turia en alerta naranja. Antes de iniciarse esta décima jornada, no abarcan los puestos de descenso en los que semanas atrás figuraba su nombre. Un comienzo de dudas, con falta de olfato goleador, porque argumentos dieron de sobra para estar en una zona más tranquila de la tabla clasificatoria, pero pasa factura la falta de jugadores que marquen la diferencia y a los que tampoco pudo convencer Sarver para su proyecto. Para más inri, Raillo, Juan Rodríguez y el portero Santamaría causan baja por lesión para este trascendente y complicado encuentro.
A partir de las 20:00 horas toca hacer bueno el popular dicho taurino de "no hay quinto malo". Sin el oro americano pero refortaleciendo el sentirmiento levantinista de cuna, toca dar un paso más hacia el objetivo del ascenso.
Uno de los grandes dilemas y debates del levantinismo reciente toma si cabe más fuerza ante situaciones así. Más aún cuando todavía se cuestiona y hay dudas sobre el próximo proceso de renovación del Patronato. Deportivamente hablando y después del duro batacazo del descenso donde se cuestionó si este era el rumbo correcto, se ha plantado sabia nueva y se han fortalecido algunos cimientos.
El actual líder de la categoría está 'on fire'. Sus números son envidiables, con 20 puntos de 27 posibles, hecho que le convierte en uno de los equipos recientemente descendidos más fiables del panorama europeo. Y eso que en Almería se mantuvo el tipo en escasos momentos, pero la rápida remontada obrada tras la reanudación dejó a tiro regresar con tres puntos hasta que Quique González salvó los muebles del equipo local y un empate.
Esta tarde se buscará la quinta victoria seguida en el Ciutat de Valencia. Sí, habéis leído bien, la quinta. Algo que no sucedía desde hace catroce años y que ha permitido que el coliseo granota vuelva a ser un fortín. Para hacer la brecha más amplia respecto a sus perseguidores, el Levante de Muñiz contará de nuevo con Pedro López, Rubén García y Rafael Martins. No en cambio con Casadesús, que ultima su recuperación. En la mano del técnico cántabro estará incluirlos en las convocatorias que tan difíciles se le presenta de hacer, así como el de encajar un puzzle en el que Espinosa podría ceder su puesto de partida como novedad más destacada.
Después de su eliminación en Copa del Rey, el Mallorca toma el vuelo a la capital del Turia en alerta naranja. Antes de iniciarse esta décima jornada, no abarcan los puestos de descenso en los que semanas atrás figuraba su nombre. Un comienzo de dudas, con falta de olfato goleador, porque argumentos dieron de sobra para estar en una zona más tranquila de la tabla clasificatoria, pero pasa factura la falta de jugadores que marquen la diferencia y a los que tampoco pudo convencer Sarver para su proyecto. Para más inri, Raillo, Juan Rodríguez y el portero Santamaría causan baja por lesión para este trascendente y complicado encuentro.
A partir de las 20:00 horas toca hacer bueno el popular dicho taurino de "no hay quinto malo". Sin el oro americano pero refortaleciendo el sentirmiento levantinista de cuna, toca dar un paso más hacia el objetivo del ascenso.
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